Este jueves, el Consejo de Gobierno de la Junta de Castilla y León se reunirá para analizar un acuerdo que está siendo evaluado por los servicios jurídicos con la esperanza de “poder hacer una desescalada con racionalidad”, en la que “la medida más importante es la campaña de vacunación”, con la que Igea se mostró “muy contento” con la media de vacunación del uno por ciento de la población diaria, lo que permite “tener un futuro muy razonable”.
No obstante, Igea puntualizó que los próximos dos meses “hay que pasarlos y hay que hacerlo bien” y recordó a la gente que “queda muy poquito”, pero que “no se equivoquen ahora” porque “sigue habiendo más de 140 personas ingresadas en la UCI e ingresos diarios”.
“Se puede ser optimista, nos queda muy poco, pero hay que ser responsable y que sabemos que hay sectores que están muy agotados, por eso pedimos un último esfuerzo tras haber intentado limitar las medidas en el espacio para que sean lo menos generalizadas posibles”, expuso Francisco Igea.
En este sentido, el vicepresidente del Gobierno autonómico pidió a la población que “aguante un poco porque el verano está ahí”, para cuando se espera que “la población vulnerable esté completamente inmunizada”. En este momento, más del 90 por ciento de las personas mayores de 70 años ya han recibido una dosis y más del 50 por ciento de los mayores de 60 años también, lo que supone “un porcentaje de inmunización completa muy alto y por encima de la media”.
Por ello, el también portavoz de la Junta pidió “responsabilidad” porque “el virus sigue ahí”. Asimismo, trasladó su preocupación por la situación en Inglaterra y otros lugares “donde la presencia de la variante india de COVID-19 ya es más evidente”. Una preocupación que, tal y como aseguró Igea, es la que mantiene a la Junta “con un nivel de alarma importante”, a la espera de que el Consejo Interterritorial “tome decisiones juiciosas y se intente mantener una unidad de criterio”.