León, 16 de junio de 2025. La actitud del gobierno manifestada a través del comisionado del Corredor Atlántico, ha vuelto a manifestar su negativa generalizada a las inversiones para León. En concreto el comisionado pone de manifiesto todos los argumentos posibles contra la Ruta de la Plata, fabricados desde su nulo interés por acelerar la inversión y retrasarla a 2050. En el tramo central no se invierte nada y Castilla y León sigue claramente marginada por las previsiones gubernamentales.
El Comisionado llega a decir con todo el desparpajo que hay que despreciar el actual trazado ya expropiado, que a pesar de haberse diseñado en el S. XIX, discurre por zonas sin dificultades orográficas. Esto le permite ser aprovechado realizando las adaptaciones y modernizaciones oportunas, como se ha hecho con otras líneas. El Comisionado desprecia esta oportunidad y anula una de las ventajas para la reapertura de una línea que no necesita ni trazado, ni instalaciones como la alta velocidad del Corredor Mediterráneo. Para el comisionado “el trazado que no vale absolutamente para nada” y punto.
Corredor Oeste defiende que nuestro territorio necesita un ferrocarril adaptado a nuestra realidad, pero sin embargo esas teorías del gobierno que defiende tan vehementemente el comisionado, le justifican hablar alegremente de que el ferrocarril puede tener un coste “de entre 3.000 y 6.000 millones de euros”, ahí es nada, cayendo en el ridículo técnico al equipararla con tales costes a la línea Madrid-Barcelona. Toda una estrategia para no hacer nada, porque es muy caro. El representante del gobierno, tomando una mentira como raíz, habla de algunas ventajas y teoriza, pero la realidad es que hay nulos resultados y siguen engañando a la sociedad como ya sucedió con el Plan Oeste.
Otro punto estelar del comisionado se manifestó, cuando con una vehemencia sorprendente, le niega otro potencial al oeste como es su desarrollo apoyado en las oportunidades militares que se realizan desde el Ministerio de Defensa y la industria y a las que el Ministerio de Transportes da la espalda. Cuando sale ese punto en la mesa de debate, corta literalmente otra intervención para decir “dejemos lo militar que salimos escaldados” llegando a pedir como un favor personal que no se hable del asunto de poder diseñar una infraestructura clave para la defensa nacional con dualidad de usos viajeros y mercancías y civil y militar. Como al comisionado no le interesó se zanjó uno de los puntos clave, rechazando los mapas que han aparecido en la prensa y que no son del agrado del comisionado. Además, negó que se pueden perder inversiones por falta de infraestructuras, algo que ilustramos en la parte inferior con noticias de prensa que no quiere aceptar, pero es la dura realidad del oeste. Sin infraestructuras perderemos inversiones, pero el comisionado lo censura. Los que vivimos en el oeste conocemos esa realidad, desgraciadamente mejor que el comisionado.
Una vez más se refleja la nula voluntad política de agilizar ni plazos ni inversiones reales. El Gobierno no ha escuchado las peticiones de las instituciones del oeste de España, ni a la gente, a pesar de que ahora pintan la Ruta de la Plata como una teórica y futurible vía que nunca pretenden realizar.