ALTA VALDUERNA, denuncia una nueva forma de saquear nuestros pueblos y su medio ambiente. La explotación en nuestros ríos Duerna y Eria, sin ningún tipo de control, de actividades auríferas realizadas por desaprensivos con nulo respeto a nuestro medio ambiente y nula repercusión económica para nuestros pueblos. Se destruyen terrazas fluviales y zonas de sedimentos, se enturbian y se alteran los cauces trucheros y la flora y la fauna ripícolas se pueden ver gravemente afectadas. ¡Esta actividad se debe regular de forma estricta ya!

ALTA VALDUERNA denuncia la pasividad de las administraciones. Urgimos a la Consejería de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio a que defienda nuestros pueblos, ante el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico. Especialmente pedimos la intervención inmediata de la Confederación Hidrográfica del Duero, tan preocupada por fastidiar a nuestros agricultores y ganaderos cuando quieren traspasar aguas por sus zayas, pero tan incompetente como siempre. Cualquier actividad de este tipo debe quedar regulada y debe suponer un proyecto que de vida a nuestros pueblos. Se puede, es posible y debe ser así.

En otro orden de cosas, ALTA VALDUERNA recuerda que la práctica totalidad de macroproyectos de fotovoltaicas en la Alta Valduerna y Quintana y Congosto han sido denegados al no superar el trámite de la Autorización Administrativa previa. Entendemos que los vecinos que estaban obligados por los contratos deben poder disponer de sus tierras y dejar los contratos sin efecto.

Finalmente, ALTA VALDUERNA se solidariza con la plataforma que lucha contra la instalación de la planta de lodos de Piedralba. Apelamos al sentido común de los alcaldes afectados. A ellos les pedimos que visiten cualquiera de las plantas de lodos que ya funcionan por todo el estado. Su ceguera, o es premeditada o es fruto de la ignorancia. Ningún responsable político razonable permitiría esta salvajada. Una vez más no debemos permitir que el ser pocos sea motivo para estos abusos. Una de las zonas más despobladas del estado, que apenas genera residuos, es curiosamente objeto de una persecución inaceptable.

ALTA VALDUERNA, renueva, una vez más, su compromiso con nuestros pueblos. Los queremos limpios, abiertos a todos, pero libres de especuladores sin escrúpulos, que pretenden un beneficio rápido a cambio de una destrucción sistemática.

En alguno de nuestros pueblos, a 28 de octubre de 2024