En el acto inaugural, el alcalde de la villa, Francisco Javier Álvarez, recordó que esta edición “está dedicada al recuerdo de José María Álvarez Pérez, canónigo, organista y maestro de Capilla de la Catedral de Astorga, nacido en Santa Marina del Rey. Mi tío, quien falleció el pasado 2 de junio e impulsó y nos dio muchos consejos para poder llevar a cabo este curso”. El regidor también señaló que: “Hoy desde el cielo esperamos que nos siga dando ánimos para continuar con este curso y para seguir cuidando el rico patrimonio que tenemos en este municipio, concretamente nuestro órgano”.
Por su parte, el director del curso, el músico leonés Miguel Ángel Viñuela Solla, puso en valor “la labor que tantos organistas, como en el caso de José María Álvarez Pérez, han hecho, de una forma desinteresada, para que estos instrumentos puedan seguir siendo disfrutados tanto por los músicos como por el público”. Seguidamente, Viñuela presentó a Andrés Cea Galán, “uno de los músicos de nuestro país que mejor conoce el órgano, y por eso os invito a leer alguno de sus artículos e investigaciones”.
Trayectoria de Andrés Cea Galán
Un organista que reparte su actividad profesional entre la interpretación, la investigación musicológica y la docencia. Se formó en España, Francia y Suiza y es Doctor por la Universidad Complutense de Madrid. Sus numerosas publicaciones se refieren, especialmente, a aspectos de la interpretación de la música para teclado, de la historia y estética del órgano en el ámbito hispano.
Su visión siempre renovada del repertorio le ha valido para ser frecuentemente invitado como concertista y conferenciante por festivales e instituciones académicas de toda Europa, México y Japón.
Ha realizado diversas grabaciones discográficas distinguidas por la crítica especializada. Trabaja también habitualmente como asesor en proyectos de restauración de órganos para diversos organismos oficiales. Actualmente, es presidente del Instituto del Órgano Hispánico.
El repertorio del concierto navegó por las notas de obras como “Españoleta” de Francisco de Tejada (ca. 1700); “Prelude que il faut jouer d’un movement” de Louis Couperin (1626-1661), “Tiento de medio registro de tiple” de Francisco Correa de Arauxo (1584-1654) y “Sinfonía en la menor” de Joseph de Nebra (1702-1768), entre otras.