En esta ocasión, se han plantado dos ejemplares, un cerezo y un arce, como símbolo de vida, crecimiento y esperanza. La vicepresidenta de la Asociación, Cristina Paz, ha recordado que esta iniciativa parte de la Federación Española de Parkinson “con la finalidad de sensibilizar a la población sobre la enfermedad”. Ha subrayado además que el proyecto tiene “un componente social, para reducir el estigma y el aislamiento de las personas con Parkinson, y otro ambiental, relacionado con la reforestación”.
Paz ha insistido también en la necesidad de aclarar que el Parkinson “no tiene nada que ver con el Alzheimer”, una confusión frecuente en la sociedad: “Muchas veces la gente ve a un enfermo de Parkinson y dice ‘me recuerda’, pero hay que quitar ese estigma”.
Por su parte, el alcalde de Astorga, José Luis Nieto, ha agradecido el trabajo de la asociación, de sus voluntarios y trabajadores “por intentar ayudar a todas las familias que se encuentran con ese problema, porque hoy son ellos, pero mañana podemos ser cualquiera de nosotros”. Ha destacadi la colaboración de la sección de jardines del ayuntamiento con esta y otras asociaciones locales “para concienciar a la sociedad sobre este problema”, y ha expresado su deseo de que la actividad pueda repetirse “muchas veces más, hasta llenar de árboles todo este parque”.