La ordenanza de terrazas irá al pleno extraordinario de este jueves, según ha explicado el alcalde, Juan José Alonso Perandones, tras una intensa labor donde se ha contrastado el documento de Astorga con las principales ciudades patrimoniales y “podemos asegurar que es una de las más permisivas”. El regidor ha insistido en que “el hecho de la expansión de las terrazas en bastante reciente” y ha argumentado que “las terrazas deben entenderse dentro de un contexto de ciudad más moderna, pero también respetuosa con el resto de vecinos y con el patrimonio”.

El concejal de Urbanismo, José Luis de la IGlesia, ha explicado que tras revisar las alegaciones y hacer una reflexión se han introducido algunos cambios como permitir que un mismo establecimiento pueda tener dos tipos de mesas y de sillas. Se permite una publicidad, aunque con restricciones, y se ha incluido que se pueda poner una pizarra por establecimiento. José Luis De la Iglesia también ha planteado que se amplía el horario a las 7 de la mañana. Por las noches no se modifica la ordenanza. “La propuesta que llevamos el jueves para su aprobación definitiva es buena para la ciudad y buena para los vecinos”.

El alcalde ha recordado que “siempre existió la costumbre de preguntar cómo se ponía la terraza para que estuviera armonizada”. Todo eso, ha insistido, se ha “ido descontrolando”. Con la pandemia, ha recordado, “se ha facilitado en todo momento que se pudieran poner terrazas” pero pasado este tiempo, Perandones ha insistido en que “para el desarrollo, imagen, derechos de los vecinos y del conjunto de la hostelería es necesario ordenar las terrazas y que permita, en un tiempo, ir renovando el mobiliario, porque con su estética nos jugamos el futuro turístico. Aquí no se quiere perjudicar a nadie”.

En cuanto a las alegaciones ha reconocido que “las respeta”, pero ha argumentado que se trata de un documento “tipo” que “muchos de los firmantes no se han leído”. Para concluir a explicado que “esta ordenanza si se conoce no puede molestar al 98 por ciento de los hosteleros porque se reconoce mayor amplitud y nadie puede decir que no haya alternativas ni plazo suficientemente amplios. Para que haya futuro turístico hay que tener unos límites”.

Mar Castro ha recalcado que con esta ordenanza no se quiere perjudicar a nadie. “Las terrazas se mantienen e incluso se mejoran en muchos casos”, ha terminado Castro.