Ha dicho el actual edil que debido a este escenario, el Ayuntamiento colocó unos generadores cuya factura en tres meses ascenderá a más de 20.000 euros y “ahora hay que hacer una obra de soterramiento que va a pagar el consistorio y que supondrá un importante desembolso”, ha dicho. En esta línea ha explicado que se va a soterrar una parte de la línea eléctrica, otra parte irá en altura y se construirá una caseta donde se ubicarán los contadores. “Además estudiaremos las fórmulas para que estas vecinas aporten una parte para pagar el consumo”, ha dicho, insistiendo en que las familias portuguesas ya han adaptado sus casas para poder recibir el suministro.
La previsión es que de cara a este otoño la situación, de la que no han querido concretar inversión, esté resuelta.