El alcalde, Enrique Busto, señaló que en esta ocasión -la iniciativa se lleva a cabo por decimotercera vez- el Consistorio ha realizado “una inversión prácticamente nula dado el buen cuidado de los materiales por parte de los escolares, ya que han tratado los libros con mimo y se pueden transmitir de unos a otros”, frente a los 18.000 destinados el pasado año para renovar los fondos.
Además, para favorecer la adquisición de material escolar, el Ayuntamiento entregará un bono de 30 euros a cada estudiante para utilizar en los comercios del pueblo, “generando una rueda económica y cultural que redunde positivamente en el entorno” y que según fuentes municipales supone un ahorro de 400 euros por escolar.
A ello hay que sumar la anexión, un año más, de la Concejalía de Educación, que comanda Clara Paredes, a la plataforma holandesa ‘Snappet’, que fomenta el aprendizaje adaptativo para Educación Primaria a través de la realización de ejercicios de diferentes asignaturas en tabletas digitales.
La directora del centro, Almudena Cambero, explicó que los escolares “tienen un gran sentido de la responsabilidad con el banco de libros, ya que deben dejar todo en buen estado para sus compañeros”. Remarcó, a su vez, que “la colaboración con el Consistorio es idílica y el colegio está muy involucrado con los valores, como lo demuestran los distintos proyectos de innovación educativa que se desarrollan año tras año”.