Es fundamental, pues, toda nuestra solidaridad y cercanía con aquellos que están sufriendo directamente las consecuencias de esta guerra. Pero también es importante evitar las acciones por libre o no coordinadas que implican un menor aprovechamiento de los recursos disponibles y que pueden conducir a situaciones legales problemáticas para aquellos mismos a los que deseamos ayudar.
Hemos de tener en cuenta que en lo que se refiere a la primera acogida de los posibles inmigrantes el gobierno ha autorizado sólo a dos asociaciones, ACCEM y Cruz Roja, para realizar esta labor con importantes implicaciones legales. Por ello, la labor de Cáritas no puede comenzar hasta que estas otras organizaciones no hayan gestionado la primera acogida. Proceder de otro modo llevaría a tener inmigrantes en situación de ilegalidad con la correspondiente ausencia de derechos para aquellos mismos a los que queremos cuidar.
No debemos olvidar tampoco que Cáritas viene atendiendo ya en España a otros muchos inmigrantes y refugiados y a otros muchos pobres y excluidos de nuestra sociedad que, por desgracia, siguen fuera del sistema de protección y siguen necesitando el auxilio que la Iglesia les presta.
Teniendo en cuenta los aspectos mencionados, deseamos informarles de las acciones que, hasta el momento presente, están siendo coordinadas desde Cáritas de Astorga y otras instituciones eclesiales presentes en nuestra diócesis, y que, por el momento, son las siguientes:
• Colecta a favor de Ucrania realizada el 13 de marzo. Hasta el momento, se han recogido 60. 000 euros.
• Ofrecimiento de 18 viviendas para acoger a familias, una de ellas ya comprometida en coordinación con el Ayuntamiento de Vega de Valcarce.
• Ofrecimiento de tres lugares para acogida de grupos numerosos (150 personas)
• Escolarización de tres menores en el Colegio diocesano s. Pablo VI de La Rúa (Ourense) y ofrecimiento de tres instituciones educativas religiosas más para la escolarización y apoyo educativo de los niños que lo necesiten.
• Ofrecimiento de mediación por parte de Cáritas diocesana para la cesión de viviendas particulares a los ayuntamientos que así lo soliciten.
• Cáritas diocesana, en coordinación con las Administraciones públicas que son las responsables de hacer frente a los gastos de acogida, mantenimiento, etc., está dispuesta a ofrecer atención alimentaria, de ropa, enseres básicos o de medicinas que se necesiten en su momento.
• Y, en definitiva, nuestras parroquias y comunidades están dispuestas a acoger y acompañar espiritualmente a los refugiados.
A estas acciones se irán sumando aquellas otras que puedan requerirse en el futuro y que tengan cabida en la amplia labor social que desde Cáritas se realiza con todos aquellos que lo necesitan. Invitamos a toda la comunidad diocesana a continuar manifestando su solidaridad con nuestros hermanos más necesitados, al tiempo que advertimos que estas ayudas deben realizarse con las debidas garantías para que sean realmente eficaces, se distribuyan de forma justa y lleguen a los que realmente las necesitan.