En una reunión mantenida el lunes 23 de diciembre en el Restaurante La Hacienda, el Consejo Editorial de El Adelanto Bañezano eligió a Manuel Carracedo Domínguez como Personaje Bañezano del año 2024, distinción que este semanario designa entre aquellas personas cuya trayectoria personal y profesional haya servido para la promoción y el conocimiento de la ciudad de La Bañeza. ‘La Alubia de Oro’ se le entregará en un acto que el semanario realizará en primavera.

Manuel Carracedo es un bañezano nacido el 6 de septiembre de 1938, hijo de Manuel Carracedo Santos y Matilde Domínguez Pérez. Casado con Marina Sevilla Martínez, de cuyo matrimonio han nacido siete hijos, su familia se completa además con once nietos y un bisnieto. De su trayectoria profesional destaca su actividad como vinatero y bodeguero en el negocio familiar, que dejó para formar parte de la plantilla del Banco Pastor en La Bañeza. Su eficiencia no pasó desapercibida y le llevó a ser designado director de la sucursal de Santa María del Páramo. De vuelta a la ciudad, continuó en la entidad como interventor y apoderado hasta su jubilación.

En el apartado personal, el consejo ha premiado con esta designación al bañezano con vocación de servicio que no suena y que no se distingue, ese que realiza el trabajo de campo en la sombra, el más difícil, el que no se advierte, el que parece no producir ningún fruto, sin más recompensa que la íntima satisfacción personal. En este sentido, se ha valorado que la vida de Carracedo ha girado en torno a la importancia de la familia, del honor, de la amistad y de la lealtad.

Al respecto, destacable ha sido su labor social en la Coral del Milenario, Monte Urba, el Círculo Mercantil Bañezano, la Peña atlético de Madrid, la colonia Las Rivas de Corporales, entre otros aspectos de la vida bañezana. También recordar que estuvo varios años trabajando como comercial para El Adelanto.

Pero si en algo se resume su compromiso y fidelidad, es en su entrega a la Cofradía de Nuestro Padre Jesús Nazareno, de la que fue juez en 1974. Dentro de la hermandad, Carracedo es intendente, maestro de ceremonias, guardián del rito, garante del patrimonio, sochantre en la liturgia, auxilio del incapaz, portero de la capilla y, sobre todo, ejemplo de autoridad para todos que pone de manifiesto cada Viernes Santo en la Procesión del Calvario rezando por los hermanos difuntos y pidiendo por una buena muerte para todos nosotros.