La plataforma ciudadana Amigos del Valle Jamuz se concentró este miércoles en Valladolid, ante la Dirección General de Minas y Energía de la Junta de Castilla y León, contra la embotelladora de Quintanilla de Flórez y en defensa del Acuífero La Maragatería.
Durante la lectura del manifiesto, desde la Plataforma le pidieron a las autoridades “que no nos dejen a merced de empresas especuladoras y extractivas de unos recursos que son cada vez más escasos. En el tema del agua, su protección debe ser aún más comprometida, mirando hacia el futuro”.
Manifiesto
Hemos venido a la capital de la Comunidad Autónoma para exponer públicamente nuestras razones a la oposición a una planta embotelladora de agua mineral en el Valle Jamuz, en el municipio de Quintana y Congosto y para que nos oigan las autoridades competentes en materia de aguas minerales. Somos de León, del sur de León, del Valle Jamuz, un rincón bien desconocido hasta hace muy pocos años, no significábamos gran cosa a nivel autonómico, y mucho menos a nivel nacional, venimos de un valle cuya principal fuente económica se basa en la agricultura y ganadería, nuestros pueblos son poco conocidos, con la salvedad de Jiménez de Jamuz, pueblo alfarero por excelencia, y que a bien seguro todos conocéis, son unos genios trabajando el barro, una industria artesanal y artística reconocida a nivel nacional e internacional.
Ahora que ya nos hemos presentado y que podéis situarnos en el mapa, solo podemos añadir que formamos parte de eso que han dado en llamar España vaciada, nada más lejos de la realidad. Somos de la España más llena de vida. Los empresarios saben muy bien que en estas zonas es donde hoy se encuentran los recursos que ellos necesitan para que sus industrias sigan generando beneficios. Nunca se acordaron de nosotros, es ahora ,cuándo se acercan a nuestros pueblos con grandes proyectos empresariales, nos ofrecen migajas a cambio de toda esa riqueza que nosotros hemos sabido conservar en el tiempo. Por ello, aquí y ahora le pedimos a nuestras autoridades que no nos dejen a merced de empresas especuladoras y extractivas de unos recursos que son cada vez más escasos, por lo que su protección debe ser aún más comprometida, mirando hacia el futuro.
El proyecto de planta embotelladora de agua mineral, que se pretende instalar en el municipio de Quintana y Congosto, no fijará población en el valle Jamuz, no generará riqueza para los habitantes de la zona, pondrá en riesgo la agricultura y ganadería, ofrecerá tan solo unos reducidos puestos de trabajo, y a cambio de esas migajas pondremos en peligro un reservorio de agua que, a bien seguro, en muy pocos años añoraremos. Porque el agua es un bien escaso, porque el cambio climático es evidente y porque el agua es finita, por ello nuestra protección de este recurso debe ser infinita. La sequía que estamos padeciendo y el cambio climático nos llaman a la acción, a actuar con responsabilidad, a escuchar a la madre naturaleza y a poner voz a los signos que evidencian que debemos protegerla.
El agua es como el abrazo de la madre, debemos disfrutarla pero también respetarla. El agua es ese gran tesoro al que no se le debe poner precio,ni permitir que con ella se especule, cuidar y proteger el agua es protegerla vida misma. Una planta embotelladora de agua mineral no produce agua, produce plástico, seamos sensatos disfrutemos del agua como un bien público y gratuito.
Desde la humildad que nos caracteriza seguiremos defendiendo el reservorio de agua que alberga el acuífero la Maragatería, lo haremos por nosotros y también por las generaciones venideras.