Además, entre los fines de la asociación también está el de buscar alternativas para esta zona rural. Del Río explica que son varias las familias que, tras alcanza la jubilación, están volviendo a los pueblos y, en definitiva, “no queremos quedar sepultados bajo estas placas”.
La asociación también echa en falta más implicación de los ayuntamientos para frenar estos macroproyectos. Es por eso, que desde la nueva agrupación vecinal se va a buzonear un escrito explicando los perjuicios de estos parques solares “con el objetivo de concienciar a los vecinos”
Del Río ha explicado que se están informando y recabando datos porque el plazo para presentar alegaciones termina el 2 de junio. Por último ha destacado que “las promotoras de estos parques ofrecen unos precios por hectáreas (800 euros durante 30 años) que no son reales para este tipo de terreno”.